A mi parecer, lo mas importante en un quesillo es la textura, me gusta que sea suavecito como mantequilla; y en cuanto al sabor, no me gustan empalagosos, creo que con la leche condensada y un poquito de caramelo por arriba es más que suficiente de dulce!!; esta receta cumple con esos criterios, así que para mi, es el quesillo perfecto!

• 5 huevos

• 1 lata (395 gr.) de leche condensada

• 395 mililitros de leche completa (líquida) (se puede sustituir con leche descremada)*

• 1 cucharadita de ron

• ½ cucharadita de cacao

• 1 cucharadita de esencia de vainilla

• 1 cucharada de agua

• ¼ taza de azúcar

​1- Previamente hacemos un caramelo con ½ taza de azúcar y 5 cdas de agua. Lo dejamos fundir a fuego medio hasta que se torne de un color dorado claro. Debes evitar que se queme ya que se pondría un poco amargo. Dejamos enfriar mientras preparamos el quesillo con sangría o flan.

2- Ponemos en la licuadora la leche condensada, la leche entera, los huevos (con su clara y yema) y la canela. Licuamos por tres minutos, incorporamos la sangría y batimos unos 30 segundos más. Esta mezcla la vertemos sobre el molde en el cual hemos elaborado previamente el caramelo que ya debe de estar totalmente frio. Después de verter esta mezcla, agregamos la ralladura de naranja y los melocotones cortados en trozos. Lo llevamos al horno a 175º por 1h 15min Horno (precalentado).

3- Dejamos enfriar y lo llevamos a la nevera, desmoldamos al día siguiente.